• Fecha de emisión: 08/08/2007
• Código: 2007-18-H
• Valor: $ 50 (pesos uruguayos)
• Diseño gráfico: Diego Tocco
• Tirada: 10000 Hojas Filatélicas
• Tema: Celebraciones/Conmemorativo

Hoja filatélica fue creada en base a fotos proporcionadas por el Movimiento Scout del Uruguay. Se agradece especialmente la cortesía del Sr. Kevin Snair en autorizar la utilización de la foto de Baden Powell junto al Duque de Connaught en el 3er Jamboree (1929).

500 MILLONES DE SCOUTS

En 2007 el Movimiento Scout cumple sus primeros 100 años. Se estima que a lo largo de su historia han participado de él más de 500 millones de personas de todas las nacionalidades, razas y credos.

El Movimiento Scout constituye hoy la organización juvenil de educación no formal más grande del mundo, contando con 28 millones de miembros en más de 150 países o territorios.

LA MISIÓN

La Misión del Movimiento Scout es:

Contribuir a la educación de los jóvenes a través de un sistema de valores basado en la Ley y la Promesa Scout, para que participen en la construcción de un mundo mejor, donde las personas se desarrollen plenamente y jueguen un papel constructivo en la sociedad.

UN MÉTODO EDUCATIVO

El Movimiento Scout permite a los jóvenes descubrir el mundo más allá de la escuela, aprender de los demás y compartir ese conocimiento con otros.

Desarrolla el autoconocimiento, ayudando a los jóvenes a explorar, descubrir y aprender.

Es complementario de la familia y de la escuela, respondiendo a necesidades que ellas no cubren.

Es voluntario y abierto a todos quienes acepten sus principios.

Su método se basa en 6 elementos fundamentales:

*La educación a través de la acción: mediante actividades atractivas y desafiantes propuestas y organizadas por los propios jóvenes.

*La vida comunitaria, que fomenta la vivencia del trabajo en equipo, la democracia y el liderazgo.

*La Progresión Personal: una invitación a establecer y alcanzar sus objetivos personales de crecimiento.

*La adhesión libre y voluntaria a una Promesa y una Ley, que proponen un estilo de vida que cada uno está invitado a descubrir y adoptar.

*El contacto con la naturaleza: el ambiente natural y también el ambiente del Hombre y su organización: la sociedad y su realidades.

*La acción educativa de los adultos: que con su presencia estimulante animan el proceso educativo.

EL LEMA DEL CENTENARIO: UN MUNDO, UNA PROMESA

El lema del Centenario responde a las aspiraciones de los jóvenes. Se basa en la Misión del Movimiento, sobre sus valores y su propuesta educativa. Es un lema de unidad y de universalidad.

Es el mundo que los jóvenes ven como una promesa que vendrá. Es el mundo actual que ellos deciden cambiar para volver más armonioso y humano. Recíprocamente, ese mundo espera una promesa de los jóvenes a comprometerse a trabajar juntos por la construcción de una sociedad más justa y más fraterna.

Por encima de las diferencias de orígenes, de sexos, de culturas, de religiones; la Promesa universal de los scouts compromete a jugar un papel activo para crear un mundo mejor.

100 AÑOS DE HISTORIA

Para hablar de la historia del Movimiento Scout es imprescindible hablar de su fundador: Lord Robert Baden Powell.

Nació el 22 de febrero de 1857, hijo menor de una familia de 7 hermanos cuyo padre falleció cuando él tenía 3 años.

Si bien no fue un estudiante brillante, se destacó desde temprana edad por sus dotes artísticas, su curiosidad y su amor por la naturaleza.

A los 19 años comienza su carrera militar que lo llevará a la India y África donde tendrá la ocasión de vivir ricas experiencias y descubrir valiosos elementos de la cultura de esos pueblos, que años más tarde plasmará en sus escritos.

Durante el primer período de su carrera Baden Powell fue un militar muy popular, no por haber participado de numerosas batallas, sino por sus habilidades para la observación y exploración que le permitieron llevar adelante con éxito diversas misiones de reconocimiento. Otras de sus habilidades naturales: sus dotes artísticas y sociales también contribuyeron a su popularidad y frecuentemente era requerido para organizar actividades artísticas y culturales.

En 1899, ya con el grado de coronel, Baden Powell es enviado nuevamente a África del Sur a defender la pequeña ciudad de Mafeking, un punto considerado estratégico en la guerra que entonces libraba Inglaterra con los Boers.

El 11 de octubre de 1899 los Boers sitian Mafeking. Este sitio duraría hasta el 17 de mayo de 1900. Durante ese tiempo Baden Powell dirigió la defensa de la ciudad, pero además organizó actividades culturales y deportivas para la población civil. Reunió a los adolescentes que no tenían edad para ser soldados y los organizó en equipos. Los jóvenes ayudaban a cuidar a los heridos, distribuían el diario y el correo, hacían de mensajeros, observadores y muchas otras tareas. Este episodio hizo descubrir a Baden Powell el enorme potencial de los jóvenes cuando se los organiza y se les ofrece una propuesta clara.

Los corresponsales de la época hacían llegar a Londres las noticias de Mafeking, con lo cual la atención de los británicos estaba expectante de lo que ocurría en aquel pequeño punto de África.

Finalmente, tras 217 días de sitio, Mafeking fue liberada. La población tributó homenaje a su defensor y cuando llegó la noticia a Londres, el pueblo británico celebraba en las calles. Baden Powell regresa a Inglaterra convertido en un héroe nacional.

Luego de su regreso, en los últimos años de su vida militar, Baden Powell es fuertemente impresionado por la situación social que vive su país: pobreza, desocupación, alcoholismo, criminalidad. Una problemática que impacta particularmente a los jóvenes.

Movido por este panorama alarmante, por las experiencias que vividas durante su vida militar y por el inesperado éxito que habían tenido entre los jóvenes algunos escritos sobre exploración que él había elaborado para uso militar, decide escribir un texto dedicado especialmente a la juventud. La fuente de este libro fue su propia vida, sus propias experiencias. Se trataba de una propuesta simple que invitaba a los jóvenes a organizarse en pequeños equipos y disfrutar de la naturaleza, el juego, el servicio a los demás. Por aquel tiempo algunos educadores renombrados como Montessori o Freinet, entre otros, promovían ya la auto educación en oposición a la instrucción autoritaria de la época. De alguna forma Baden Powell fue el primero que, transponiendo su propia vida y experiencias en un modelo pedagógico, lo presentaba de una forma simple, práctica, accesible a todos y dirigido a los propios jóvenes.

Pero antes de dar a conocer sus escritos, Baden Powell decide hacer una experiencia piloto de su propuesta para saber si podía funcionar. Quería saber cómo funcionaría en la práctica lo que hoy llamaríamos "la dinámica del pequeño grupo". Es así que reúne un grupo de 20 adolescentes entre hijos de sus amigos y muchachos de los suburbios londinenses y con ellos parte a acampar en la Isla de Brownsea, cerca de Londres, entre el 1º y el 9 de agosto de 1907.

Durante esos días en contacto con la naturaleza, organizados en 4 "patrullas", donde cada uno tenía un rol, con un programa de actividades desafiantes, esos jóvenes tuvieron la experiencia del primer campamento Scout. La historia del Movimiento Scout había comenzado.

La experiencia fue todo un éxito y al finalizar este campamento, Baden Powell confirma que lo que había intuido era capaz de ofrecer a la juventud británica un campo de actividad formativa útil e interesante. Con esta convicción termina de escribir el libro "Escultismo para muchachos" (Scouting for boys) que aparecería en forma de fascículos mensuales a comienzos de 1908.

Para la propia sorpresa de Baden Powell, esta publicación se convirtió rápidamente en un éxito. Debido a la gran popularidad del héroe de Mafeking y a lo original y atractivo de su propuesta, miles de adolescentes de toda Gran Bretaña comenzaron a reunirse y a poner en práctica la invitación que BP les hacía desde su libro. Así, sin proponérselo, Baden Powell se encontró a si mismo respondiendo cientos de cartas de jóvenes que habían adoptado el escultismo, o recorriendo el país para dar conferencias a un público mayoritariamente joven que lo escuchaba con gran atención. De esta forma, las nuevas unidades scouts aparecían como hongos en toda Gran Bretaña y muy pronto este nuevo impulso trascendió fronteras hacia toda Europa. La asombrosa expansión del movimiento scout no fue obra ni de los educadores profesionales, ni de los gobiernos, ni de las iglesias. Fue de los propios jóvenes por si mismos.

En 1909 Baden Powell realiza un viaje que lo llevará a Argentina y Chile donde, de la mano de los ingleses que trabajaban en el ferrocarril, ya había llegado la noticia y el interés por el nuevo movimiento. En éste último país se crea la primera asociación Scout de América.

Sin que Baden Powell se lo hubiera propuesto, sus ideas se habían expandido por todo el mundo y asociaciones y grupos scouts se creaban por todas partes.

Surge allí la necesidad de dar forma a una organización que reúna y coordine a todos los scouts para lo cual se crea una oficina internacional en Londres. En 1910 Baden Powell abandona definitivamente la vida militar para dedicarse de lleno al Movimiento Scout. En ese momento, sólo en Gran Bretaña había ya más de 100.000 scouts.

De ahí en más, el movimiento continuará creciendo sin cesar y ello implicará ir respondiendo a los desafíos que ese crecimiento implicaba: la identidad de un movimiento internacional, la formación de educadores adultos, la adaptación de la propuesta - originalmente dirigida a adolescentes de 12 a 17 años -, para niños menores de 12 y a jóvenes mayores de 17. Es así que se crea en 1916 la rama Lobatos para los más pequeños y en 1922 la rama Rover para los mayores. En 1920 se realiza en Inglaterra el primer Jamboree: encuentro mundial de Scouts, que en aquel entonces contó con 8000 participantes de 33 países. Los Jamborees, verdaderos encuentros interculturales que promueven la paz y la fraternidad mundial, continúan realizándose desde entonces cada 4 años. Solamente fueron suspendidos durante los años de la 2ª guerra mundial.

Durante estos años, hasta 1938, cuando se produjo su retiro, Baden Powell continuó trabajando activamente en el Movimiento Scout junto a un equipo de colaboradores cada vez más grande. Su gran intuición pedagógica, su carácter jovial y su ingenio fueron elementos clave para afrontar los numerosos desafíos que iban surgiendo a medida que aquel pequeño experimento con 20 jóvenes en la isla de Brownsea se convertía en la mayor organización juvenil del mundo.

En 1938, ya con un delicado estado de salud, Baden Powell se retira definitivamente a Kenya, donde pasará sus últimos días con su familia hasta su fallecimiento el 9 de enero de 1941. En ese momento había en el mundo más de 3 millones de scouts en actividad.

Contrariamente a lo que algunos hubieran pensado, tras la muerte de Baden Powell el movimiento scout no se debilitó.

A esa altura ya tenía sólidas bases y continuaba desarrollándose. De esta manera se fue reorganizando para darse una forma de coordinación y gobierno adecuada a una organización internacional de su tamaño. Simultáneamente se fue dando una cada vez mayor reflexión pedagógica para mantenerse fiel a las enseñanzas de Baden Powell, pero a la vez actualizar la propuesta y adecuarla a las diversas realidades donde el movimiento estaba presente.

En los años 60 se ve la necesidad de crear una rama específica para los adolescentes de 14-17 años. Surge así en muchos países la rama Pioneros.

La antigua Oficina Internacional de Londres, luego de un período de funcionamiento de Canadá, pasa a ser la Oficina Scout Mundial y en 1968 se traslada a la ciudad de Ginebra- Suiza donde todavía permanece como sede mundial del Movimiento.

A comienzos de los años 70 niñas y adolescentes comienzan a integrarse al movimiento que, hasta el momento, había permanecido exclusivamente masculino. Es así que en 1973, el movimiento deja de lado el término Boy Scouts (que alude al género masculino) para pasar a llamarse Organización Mundial del Movimiento Scout.

A lo largo de este primer siglo de existencia el Movimiento Scout ha recibido numerosas distinciones a nivel nacional e internacional en reconocimiento a su labor en educación para la paz, formación de líderes, conservación del medio ambiente y su aporte a la educación no formal. Como organización con estatuto consultivo ante las Naciones Unidas tiene vínculos de cooperación e intercambio con numerosas organizaciones internacionales que trabajan por el bien de la humanidad.

Durante estos primeros 100 años, millones de hombres y mujeres han pasado por el Movimiento Scout, entre ellos algunas importantes personalidades del mundo de las ciencias, las artes, la política, la religión, líderes sociales, etc.

En todos ellos el ser Scouts ha dejado una huella imborrable. La misma que hoy comparten 28 millones de jóvenes que están cambiando el mundo.

LA HISTORIA EN URUGUAY

Los antecedentes del movimiento scout en nuestro país se remontan al año 1912 cuando se funda una organización inspirada en el movimiento que había surgido en Inglaterra bajo el patrocinio de Baltasar Brum que por entonces era ministro de Instrucción Pública. En 1914 comienzan a funcionar en la Catedral de Montevideo los Exploradores Orientales. Estas organizaciones desarrollaron sus

actividades durante algunos años y luego desaparecieron. Durante algún tiempo subsistieron únicamente algunos grupos independientes y los Exploradores de Don Bosco, animados por los Padres Salesianos. En 1930 se crea el grupo "First" en la órbita de la colonia inglesa en nuestro país. En 1942 se crea el grupo scout de la ciudad de Juan Lacaze que hoy continúa funcionando como parte del Movimiento Scout del Uruguay.

En 1947 muchos de los grupos independientes que entonces existían se nuclear en la Asociación Nacional de Boy Scouts. Esta asociación fue reconocida por la Organización Mundial del Movimiento Scout en 1950.

En 1955 Germán Sellera funda la Asociación de Scouts Católicos del Uruguay.

Entre 1973 y 1983 existió también el IUDE (Instituto Uruguayo de Escultismo) que luego volvió a integrarse a la Asociación Nacional que a partir de entonces pasó a llamarse Asociación de Scouts del Uruguay (ASU).

A comienzos de los 90 se gesta la unificación entre las dos asociaciones entonces

existentes: la Asociación de Scouts del Uruguay y la Asociación de Scouts Católicos del Uruguay. Fruto de esa unión, el 18 de diciembre de 1994 se crea el Movimiento Scout del Uruguay que pasa a tener el reconocimiento de la Organización Mundial del Movimiento Scout.

Hoy el Movimiento Scout del Uruguay cuenta con cerca de 3000 integrantes, está presente en 14 departamentos de nuestro país y busca, manteniéndose fiel a las ideas de Baden Powell, responder con una propuesta actualizada a las necesidades de los niños, jóvenes y adultos de nuestro tiempo.

LA MISIÓN DEL MOVIMIENTO SCOUT DEL URUGUAY:

"Somos un Movimiento de jóvenes, niños y adultos comprometidos libre y voluntariamente con la transformación de nosotros mismos y de nuestra sociedad a través de la acción educativa."

Movimiento Scout del Uruguay: Andrés Martínez Trueba 1187 Montevideo

Tel- fax 410 8840 413 6374 msu@msu.edu.uy http://uy.scouts-es.net