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Año Polar Internacional

  • Fecha de emisión: 07/10/2008
  • Código: 2008-20-mp
  • Diseño gráfico: Coord. Filatelia

Año Polar Internacional
EL AÑO POLAR INTERNACIONAL (API) 2007-2008 es una iniciativa de investigación interdisciplinar, coordinada a escala internacional, que marca el comienzo de una nueva era de la ciencia polar.
El API permitirá dar un enorme paso en la comprensión de las regiones polares y la importancia fundamental que tienen para el clima los ecosistemas y las sociedades de la Tierra.
Inspirará a las generaciones futuras de investigadores de las ciencias naturales y sociales, estimulará a los tecnólogos y atraerá la atención de la opinión pública internacional.
El API aportará un legado científico importante y fomentará el espíritu de colaboración internacional en la investigación. En una época de importantes cambios planetarios, el API brinda a los científicos la oportunidad de ir allí a donde nunca antes habían podido ir, recoger datos como nunca antes lo habían hecho y establecer sistemas de seguimiento en lugares donde nunca antes habían existido.
El API aportará nuevos conocimientos en varias áreas clave, entre las que se incluyen:
La población:
Las comunidades árticas tienen la capacidad de adaptación, pero los cambios en las condiciones climáticas y sociales plantean grandes desafíos a su forma de vida. Se llevarán a cabo importantes estudios de sostenibilidad de las culturas tradicionales.
El Planeta:
En el curso de la historia de La Tierra, las placas tectónicas han desplazado continentes y creado océanos y cadenas montañosas, repercutiendo en el clima polar y global, así como en las actividades humanas. Entender la historia de estos cambios es clave para predecir los cambios futuros.
El terreno:
El medio ambiente polar se ve amenazado por el cambio climático y los riesgos provocados por los seres humanos, tales como la contaminación. Es importante supervisar estos cambios y entender la adaptación del ecosistema a ellos.
El océano:
Podrían producirse cambios fundamentales en la circulación de los océanos, por ejemplo, en la Corriente del Golfo, debido a la creciente aportación de agua dulce procedente de la fusión de los mantos de hielo y otros cambios climáticos.
Las nuevas formas de obtener datos, incluidos novedosos sistemas por satélite y vehículos con control remoto, ayudarán a seguir los cambios en las condiciones oceánicas y en los ecosistemas marinos.
El hielo:
El derretimiento de mantos de hielo polar contribuirá de manera significativa al aumento del nivel del mar. Se requieren mediciones por satélite y modelos informáticos con el fin de estimar mejor los cambios futuros.
La disminución del hielo marino, especialmente en el Ártico, que en el plazo de 100 años podría verse desprovisto de hielo durante el verano, afectará significativamente al clima global y a los ecosistemas polares.
Las muestras de hielo de kilómetros de profundidad de los glaciares polares revelan cientos de miles de años de historia del clima.
La atmósfera:
Una mejor comprensión del papel que desempeñan las regiones polares en el tiempo y el clima es esencial para obtener mejores previsiones meteorológicas y comprender el cambio climático.
Las continuas mediciones polares en la superficie y desde satélites son fundamentales para supervisar la disminución de la capa de ozono y el transporte de contaminantes atmosféricos.
El espacio:
Las partículas cargadas procedentes del sol interactúan con la atmósfera superior en las regiones polares provocando un “clima espacial” que afecta a nuestra salud, a las comunicaciones y a los sistemas de energía eléctrica.
La claridad de la atmósfera polar brinda una ventana ideal para la observación astronómica del espacio lejano.
La enseñanza y divulgación:
El API inspirará a las generaciones futuras de científicos polares y dará relevancia a los temas polares en todos los niveles de la enseñanza.
 
COORDINACION FILATELIA